Educar en la autonomía

¿Quieres introducir la autonomía en tu crianza? ¡Tienes que leer esto!

El pasado jueves 9 de septiembre, Ana Belén Fernández Blanco, psicomotrista y experta en desarrollo infantil y atención temprana intervino en directo, en Instagram para hablarnos de educar en la autonomía. 

Ana Belén aboga  por el acompañamiento, por el respeto del ritmo del desarrollo del niño y por los límites claros y con amor. “Tenemos que aprender a observar y dejar de proyectar lo que esperamos y respetar su individualidad para ayudarle a crear la autonomía y la seguridad que van a necesitar el resto de su vida. Como padres sois los referentes y con quien se va a fijar el resto de su vida, constata la especialista que apuesta por los muebles a la altura de los niños en el hogar para fomentar su crecimiento y su autonomía.

La psicomotrista Ana Belén colaboró con Muebles ROS con el asesoramiento en el catálogo Arco Iris, que ahora se ha integrado en ROS Mini, en el que se encuentran los muebles a su altura pensados para facilitar la autonomía de los más pequeños, de los que destaca el espejo con barra, la torre de aprendizaje, el mueble higiene, los colgadores y las camas.

Según la especialista el espejo con barra sirve “desde el primer momento con acompañamiento”. A medida que pasan los meses, a través del espejo, “el bebé va encontrar una imagen y va hacer una exploración de esta imagen”. En el espejo verá sus propios movimientos. El espacio con el espejo se duplica al ver lo que hay detrás y alrededor. Ana Belén insiste en que “el espejo le dará muchas posibilidades de desarrollo visual y táctil”. Posteriormente, cuando empiezan a moverse la barra servirá para que se puedan sostener y alcanzar la bipedestación así como ver una nueva imagen de ellos mismos”. Es importante respetar el ritmo de desarrollo del niño. La barra ayudará con esos primeros pasos que le darán estabilidad y equilibrio.

“Es un buen elemento para situar en el salón en la zona en la que vosotros estáis ya que a los niños les gusta sentirse acompañados en los primeros años”. La especialista comenta que la barra y espejo tienen su función hasta los 18 meses, que es cuando la media de los niños ya anda. El espejo sí que se sigue utilizando. Y otra posibilidad es colocarlo en la habitación si se dispone de espacio y eso compromete a las familias a estar con ellos ya que demandan la presencia de la familia sobre todo los seis primeros meses.

“Hablar a su altura mejora la comunicación”, afirma la experta en el directo de Instagram, Educar en la autonomía. La torre de aprendizaje “sube al niño” y la experta lo recomienda también para abuelos que no pueden permanecer en el suelo a su altura. Se indica cuando el niño puede estar en posición de pie y subir y bajar solos. A los niños cuando empiezan andar, les encanta trepar. A la familia, “la torre de aprendizaje, les da seguridad”. Y les permite participar y disfrutar de las actividades cotidianas que forman parte de la vida. Y añade que “la torre de aprendizaje permite que el niño esté seguro” y solo tenemos que preocuparnos “de comunicarnos y relacionarnos con él respetando siempre sus destrezas”. Como experta recomienda que “no los apartéis de las actividades diarias” y que “disfrutéis del camino y no pretendáis solo llegar a la meta”. Así los niños adquieren habilidades con respeto, seguridad y autonomía.

“El respeto en la autonomía es fundamental porque le ayuda a crear su propia autoestima y a sentirse competente, aunque la tarea no sea perfectamente realizada como la haría un adulto”, insiste la experta en desarrollo infantil. Y remarca que “nos estamos olvidando de la vida cuotidiana por el ritmo de vida acelerada que llevamos” y propone “incluir al niño en ella para que participe de las tareas del hogar”.

Con el mueble higiene “podemos iniciar el hábito al estar a su altura. Y además permite mirar a su referente desde abajo, poder imitar, observar y hacer los movimientos de higiene dientes, de enjaguar o de peinarse”. El adulto es su referente. “Cuando nos podemos a su altura estamos dialogando y comunicando pero a veces necesita esa mirada hacia arriba. El mueble higiene permite que los adultos sean su referente y facilita a su vez su autonomía haciéndolo competente”. Insiste en “disfrutar del proceso” y así el “niño aprenderá de forma segura y tranquila”.

El armario propuesta le permitirá elegir al niño su ropa según las estaciones.  Le ayudará a sentirse competente en la elección de la ropa y adquirir rutinas que son importantes para su desarrollo. Elegir y saber tomar decisiones. Hacerse competente en las elecciones. Ana Belén insiste en que “el acompañamiento en la crianza es fundamental”.

Con las estanterías para cuentos a su altura podrá escoger el cuento que más le interesa. La experta valora que los libros se puedan ver de frente para facilitar la elección al niñ@.

También destaca la mesa para pintar para fomentar su creatividad desde sus primeros garabatos y movimientos y los colgadores para responsabilizarse de dejar y guardar sus cosas.

Educar en la autonomía es darles herramientas para que crezcan seguros, responsables y felices siempre con los límites claros y respetuosos y con el acompañamiento de la familia.

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